Sombras

Han sido unas semanas duras. De replantearme todo, absolutamente todo. Semanas de estar harto. Cansado de todo y de todos. De recalibrar el dar y no recibir, de estar y que no estén, de amar y no sentir amor. De entender que el piso es lo unico que me sostiene. De preguntar si el dinero es solo es la gasolina de mis proyectos, o también el gas que enciende de algunas de mis relaciones (y que tanta responsabilidad tengo yo en eso). Han sido semanas de comprender que mis reacciones son emocionales porque tengo expectativas o necesidades que no estoy cubriendo. Han sido días de soltar la perspectiva que tengo de mi mismo para curiosear la visión que otros tienen de mi e intentar verme desde un punto de vista donde se forman muchas sombras. Uy pero que guapo y misterioso me hacen ver las sombras ¿cierto? Sí, a mi también me gustó la foto.

Wikipedia dice que según la psicología analítica de Carl Jung, la sombra es el lado oculto de nuestra psique. Pero por ahí dicen que mientras mas te acercas a la luz, mas grande se hacen tus sombras. Pues, han sido semanas de revisar las mías. De reconocer que soy un arpía, un materialista, egoista, controlador y malcriado. Semanas de entender que lo unico malo de ser todo eso, es que soy descarado siendo todas y cada una de esas cosas. Han sido semanas de soledad, de aislamiento, abandono, separación, incomunicación, destierro y desarraigo. De asumir que aunque extraño mis raices y el lugar de donde vengo, no quiero regresar ni de visita. De aceptar que extraño a mi familia, aunque sepa que el concepto que tengo de “familia” se desvaneció y se devaluó entre egos y peleas, tal y como lo hizo el Bolivar. Entender que las creencias que cargo conmigo sobre el concepto de raíces y familia, son solo lugares y momentos que fueron, ya no son y que nunca volverán a ser. Son momentos y lugares que viven en mi recuerdo y solamente encontraré dentro de mi mismo porque las raices y la familia no son solamente la percepción de familiaridad que tenemos hacia un lugar o hacia un grupo de personas.

Han sido semanas duras. Y para mi, hoy es otro día de vivir un día a la vez. Por supuesto que claro que yes que hoy también estoy harto de todo y de todos. Pero al menos hoy no estoy harto de mi mismo. Al contrario, me celebro y me perdono por no saber mejor. Me amo, me alabo y me venero porque yo soy el unico que hace que yo sea posible. Tengo muchísimas sombras y para otros es muy fácil reconocerlas porque se niegan a reconocer las suyas. Es evidente que cuando me lo propongo puedo ser una persona horrible, pero conmigo nada es gratis: soy transaccional, vengativo, frío y calculador. Pero no oculto nada, mucho menos las disfrazo porque todas ellas se pintan gracias al foco de mi propia luz, la misma luz que pasa a través de mi para iluminar y ayudar a otros.

    Han sido semanas duras. Y para mi, hoy es otro día de vivir un día a la vez. Por supuesto que claro que yes que hoy también estoy harto de todo y de todos. Pero al menos hoy no estoy harto de mi mismo. Al contrario, me celebro y me perdono por no saber mejor. Me amo, me alabo y me venero porque yo soy el unico que hace que yo sea posible. Tengo muchísimas sombras y para otros es muy fácil reconocerlas porque se niegan a reconocer las suyas. Es evidente que cuando me lo propongo puedo ser una persona horrible, pero conmigo nada es gratis: soy transaccional, vengativo, frío y calculador. Pero no oculto nada, mucho menos las disfrazo porque todas ellas se pintan gracias al foco de mi propia luz, la misma luz que pasa a través de mi para iluminar y ayudar a otros.

Me amo, me alabo y me venero porque yo soy el unico que hace que yo sea posible.

Hoy es un día de asumirme como un niño que esta aprendiendo a caminar y a respirar en un mundo hostil, que puede ser bonito cuando escojo verlo desde ese lugar. Estos días me han mostrado la belleza de permitirme ser vulnerable y que en ella también hay cosas que debemos celebrar. ¿Y qué puede ser mas lindo que celebrar mi vulnerabilidad junto a ustedes? Muchas de mis interacciones no se ven en mis publicaciones o en mis stories, pero son reales y agradezco con toda la humildad que muchos de ustedes se hayan tomado el tiempo para escribirme y recordarme que todo lo que hago es por la gente, no por el reconocimiento de instituciones públicas o privadas. Estoy harto de pretender que no me importa cuando quieren a esta linda cara presente, siendo bonita, atractiva y sonriente, pero vacía como una especie de Barbie del VIH. Sí, fui bendecido con algo de belleza, pero también estoy lleno de veneno y rabia.

Mi ira es como un caballo que solo logra ser domado con latigazos de sexo, yoga y terapia. Mi rabia es sádica y descarada, capaz de constriur barcos solamente para verlos naufragar. Esta rabia no es solo mía, ni es solamente el resultado de mis vivencias, sino también la consecuencia de lo que otros nos han hecho vivir por exigir nuestro derecho a ser quien queremos ser. Es una rabia por lo que algunos continúan viviendo. Mi ira es incallable porque tiene mas años que yo. Es una rabia generacional, que apenas ahorita está aprendiendo a comunicarse, pero que eventualmente les va a hablar de derechos, estigma, discriminación y que va a denunciar toda la porquería que sigue disfrazandose en esta sociedad mojigata, escandalizada por la identidad de género, la expresión de género y la orientación sexual. Una sociedad que está secretamente obsesionada por donde la metemos o nos la dejamos meter.

Ahorita soy un niño. Que se da oxigeno a si mismo, pero que también es capaz de darse techo, ropa, comida y muchos lujos porque estoy criando a un niño superficial que se desenvuelve en un país casí tan superficial como el muladar donde nací. Pero también soy el padre de ese niño, que lo abraza y le da amor, que reconoce sus necesidades y apegos, que le extiende la mano y le enseña a caminar en un mundo de muertos vivientes. Zombies hambrientos de luz, con antojos de devorarse la buena voluntad de las personas como si fuera un tentempié. Soy el padre que le enseña ejercicios de Pranayama a su hijo en medio de toda la contaminación y lo motivo a tener disiplina, a comer bien y a ahorrar porque el dinero nos hace feliz y los ahorros nos dan tranquilidad. Sí, es cierto que a veces puedo ser el padre que explota laboralmente a su hijo, pero ¿quien nace aprendido? En fin, sí han sido semanas duras, pero ¿saben qué? Mas dura es mi verdura jajaja 🖕🏻

Aleko